Reserva Nacional Isla Mocha
Isla Mocha
La Reserva Nacional Isla Mocha es un área silvestre protegida de crucial importancia, localizada frente a las costas de la Región del Biobío. Su creación busca resguardar un ecosistema insular único, cubriendo aproximadamente el 45% de la superficie total de la isla. Esta porción protegida abarca la parte alta de la isla, caracterizada por dos cordones montañosos que se extienden longitudinalmente de norte a sur, alcanzando una altura máxima de 340 metros sobre el nivel del mar (msnm), con una topografía bastante accidentada. Esta geografía elevada es vital, ya que en su interior nacen numerosas vertientes que suministran agua potable a la población actual de la isla.
Flora: El Bosque de Olivillo, Reliquia de las Glaciaciones
El elemento vegetal más distintivo de la Isla Mocha es su bosque de olivillos (Aextoxicum punctatum). El olivillo es una especie de gran valor científico, siendo el único sobreviviente conocido de la familia Aextoxicaceae a los ciclos de glaciaciones y deshielos ocurridos durante el último millón de años. Este árbol puede alcanzar alturas de 25 a 30 metros y se identifica fácilmente por las características punteaduras que presenta el envés de sus hojas. En la reserva, el olivillo se encuentra comúnmente asociado con el arrayán (Luma apiculata), conformando un entorno muy similar al tipo forestal valdiviano, aunque con la particularidad —aún sin explicación científica— de carecer del género Nothofagus (roble, coigüe, raulí).
Este denso bosque se distingue por su abundante presencia de epífitas (plantas que crecen sobre otras para alcanzar la luz), así como una rica variedad de helechos, líquenes, hongos y musgos, que tapizan el ambiente y contribuyen a la alta humedad y biodiversidad. En contraste, la vegetación en los sectores bajos y planos de la isla está adaptada para soportar las duras condiciones de viento y salinidad predominantes, compuesta principalmente por plantas anuales y matorrales resistentes.
Fauna Silvestre: El Hito Global de la Fardela Blanca
La reserva es un punto neurálgico para la fauna marina y aviar, albergando unas 102 especies de aves entre residentes y migratorias. Sin embargo, su mayor distinción científica y turística es la protección de la fardela blanca (Ardenna creatopus). Esta ave marina es de especial interés por ser endémica de la isla y se encuentra clasificada en la categoría de vulnerable a la extinción, lo que subraya la importancia de la reserva para su supervivencia.
La Isla Mocha es, de hecho, el sitio de nidificación más importante a nivel mundial para esta especie. La fardela construye sus nidos en cuevas que excava entre las raíces de árboles de gran tamaño, principalmente olivillos. Estudios de seguimiento con radiocollares han revelado una asombrosa ruta migratoria: la fardela viaja a lo largo de las costas de Perú con destino final a Alaska, antes de retornar fielmente a la Isla Mocha para el ciclo de anidación.
Otras especies de fauna presentes incluyen aves con problemas de conservación como el gaviotín (Sterna trudeaui) y el cuervo del pantano (Plegadis chihi), además de representantes marinos como lobos marinos y pingüinos.
Directrices de Visita y Acceso
La Reserva Nacional Isla Mocha está abierta de lunes a domingo, con horarios establecidos de 9:00 hrs de apertura y 17:30 hrs de cierre, y una hora límite de ingreso a las 16:00 hrs. Los visitantes deben considerar que la reserva es un lugar de paz y tranquilidad, por lo que se recomienda recorrerla en silencio y con calma.
Acceso y Transporte:
- Aéreo: El método de acceso principal es mediante taxi aéreo (avioneta), aterrizando fuera de los límites de la reserva. Es fundamental que el interesado contacte y contrate personalmente este servicio, ya que no es regular. Las salidas aéreas son desde el aeródromo de Tirúa (15-20 minutos de vuelo) o el aeropuerto Carriel Sur de Concepción (90 minutos de vuelo).
- Marítimo: El acceso por mar está restringido principalmente al transporte de carga y depende de las condiciones climáticas y la disponibilidad de embarcaciones que zarpan desde Lebu o Tirúa (travesía de 3 a 5 horas), siendo un servicio igualmente irregular.
Servicios y Recomendaciones:
La reserva ofrece la ventaja de contar con servicios básicos gestionados por propietarios aledaños, incluyendo alimentación, camping, alojamiento y transporte interno.
No obstante, se establecen recomendaciones estrictas para asegurar la conservación del entorno y de los recursos:
- Manejo de Residuos: El manejo de la basura es un problema en la isla. Se aconseja que cada turista retorne al continente con todos sus envases y envoltorios.
- Fuego: No está permitido encender fuego dentro de la reserva y está restringido en el resto de la isla.
- Hidratación y Seguridad: Se debe llevar agua durante la visita y planificar el ingreso a una hora prudente para no ser sorprendido por la noche en el interior de la unidad.
- Agua Potable: Es una recomendación vital no contaminar los cursos de agua, ya que son la única fuente de agua potable para los habitantes de la isla